Leyendas ganadoras
En el 2021 realizamos un concurso de microleyendas.
A través de un foro especial, y de forma individual o de creación colectiva, quienes quisieron participar publicaron una leyenda original en no más de 150 palabras.
Las microleyendas ganadoras fueron aquellas que recibieron más votos de todos los usuarios de desafioprofundo.org, en las categorías Educación Primaria (4to, 5to y 6to) y Educación Media Básica y Técnica (1ero, 2do y 3ero).
Aquí compartimos, con imágenes del equipo ilustrador de “Misterio de Cabo Frío”, las cinco microleyendas más votadas en 2021.
La flor de la higuera
Cuenta la leyenda que la higuera florece por única vez en la víspera de San Juan, precisamente a las doce de la noche, pero dura sólo algunos instantes. Según la creencia el que arranca esta flor se enriquece y es feliz para el resto de sus días. Al obtener esto, el diablo se llevará algo de tu vida a cambio
Dicen que alguien vio la flor, la arrancó y durmió con ella. Al día siguiente ya no podía ver. Piensan que el diablo se llevó sus ojos, pero fue feliz porque ganó una gran fortuna.
Sofía Díaz; Liceo N°2 Serafín J. García, Treinta y Tres
Noche ensangrentada
Cuenta la leyenda que en un establecimiento rural en donde vivían dos ancianos, sucedió un hecho que impactó a toda la zona. Un 31 de diciembre ,apareció un andante pidiendo comida y hospedaje en una estancia de la ruta 26 departamento de Paysandú.
El hombre escuchó comentarios de que ellos podrían tener dinero y decidió robarles ,sorprendiendolos por la noche. Al ver la reacción de los ancianos decidió deshacerse de ellos de forma violenta con un hacha que se encontraba en el galpón.
Hoy quienes viven en la casa donde sucedió este lamentable hecho sienten en las noches de humedad o de luna llena, lejanos golpes de hacha. Cuando pasan por allí, no son pocos los que afirman que ven la figura de los ancianos cerca al pozo, además según testigos se ve una figura vestida de negro al lado de un árbol ,mirando hacia la casa.
Emily Henderson; Primer año; Liceo Pueblo Gallinal, Paysandú.
La niña de blanco
Hace mucho tiempo antes de ser una escuela había, en este lugar, una casa en la que vivía una familia con su hija y eran muy felices. La mamá siempre la vestía de blanco . Un día los padres fueron a buscar trabajo y la dejaron sola en la casa. De pronto escuchó un ruido en la pared, la pared y se abrió una puerta que se escuchaba muchas voces extrañas. La niña se animó a entrar y había muchas personas de blanco. Ella sospechaba que los padres le ocultaban algo.
Quedó sorprendida al verlos y les preguntó:
-¿Quiénes son ustedes? ¿Qué hacen en mi casa? pero nadie le contestó.
Entonces la niña salió corriendo muy asustada y se perdió en el campo que rodea al cerro, sus padres nunca más la volvieron a ver.
Pero dicen las personas del lugar que en las noches oscuras y de viento se ve una niña de vestido blanco que corre aún con miedo.
Belén Lima. Escuela N°90. Artigas
Los elegidos del parque
Esta no es una historia cualquiera, ha pasado de generación en generación hasta llegar a mí.
Cada año el 21 de marzo a la noche, en el parque Elías Regules de mi ciudad, a las 3:33 de la madrugada suceden cosas extrañas. Un grupo de jóvenes decidió ir a acampar y ser testigos de lo que allí ocurre.
Cuando ya se estaban por dormir, sintieron un silbido en melodía que se acercaba a ellos lentamente, casi se sentía como un susurro al oído, como poesía.
Algunos del pueblo suelen decir que el espíritu del escritor se manifiesta ahí ante la presencia de personas que serán de importancia en la historia del lugar.
Vieron al espectro acercarse y con mucha valentía se animaron a conversar con él, nadie nunca supo qué fue lo que les advirtió.
Alumnos de 6to B de Escuela No 3 "Fernán Silva Valdés" - Sarandí del Yí, Durazno.
La sombra negra
Cuenta la leyenda que en Colonia hace mucho tiempo atrás, cada 24 de diciembre sucedían casos muy extraños en los que gente desaparecía... Nadie sabía por qué pasaban estas cosas, pero la gente se empezó a desesperar y comenzaron a salir a buscar respuestas. Pasaban los años y cada vez más gente desaparecía.
Una vez, una niña escuchó sonidos extraños provenientes del monte. La niña decidió ir a ver qué estaba pasando justo cuando decidió acercarse, una sombra negra se abalanzó sobre ella sin dejar rastro de la pobre niña. Nunca más se la volvió a ver. Desde ese momento los casos dejaron de suceder. Pero aún existe gente que no se olvida de esos casos y afirman que esta sombra negra volverá cuando menos lo esperemos.
Francisco Toscano, Liceo San Gabriel, Colonia de Sacramento